Esta mañana en una reunión mi gerente favorito del momento ha vuelto a hacer un comentario referente a un indicador que le daba pie a pensar que las cosas iban mejor. Ya se lo he oído más veces y creo que tiene realmente mucha razón. Ha dicho que ya no se ven pintadas insultantes en el WC. Claro que es un indicador que es difícil que aparezca asociado a un proceso clave en EFQM. Me temo que ahí no podrían aparecer esta lista alternativa de indicadores que os propongo.
Si quieres huir de los típicos indicadores aburridos de tu panel de mando, prueba con estos 20 alternativos:
- Número absoluto de personas que al comenzar la jornada por la mañana saludan con una sonrisa en los labios.
- Porcentaje de personas que cuando van a tomar un café invitan a quienes se encuentran en su trayectoria hacia la máquina.
- Número absoluto de mujeres que ocupan puestos tradicionalmente de machotes: jefas de equipo en taller, mantenimiento, ingeniería de fabricación, dirección industrial…
- Número de meses sin insultos en el tablón de anuncios.
- Número de problemas solucionados sin que el gerente ni los de calidad se enteren.
- Porcentaje de personas a las que si les propones una jornada de puertas abiertas en la fábrica te contestan: «coño, no estaría mal».
- Número de personas que si ven algo sucio o en mal estado toman la iniciativa de limpiarlo o de comunicar la incidencia para que se arregle.
- Porcentaje de personas dispuestas a tutorizar los primeros pasos de las nuevas incorporaciones.
- Porcentaje de personas que son capaces de discutir sin chillar.
- Número de horas dedicadas a echar un cable a los demás sin que te lo pidan o a partir sólo de una ligera insinuación.
- Número absoluto de veces que la gente que comparte trabajo o proyecto quedan para tomar unos tragos u organizan actividades conjuntas en su tiempo de ocio.
- Porcentaje de personas que cuando hablan con sus amistades ponen bien a esta empresa.
- Número de personas que toman decisiones y actúan usando el argumento «como si ésta fuera mi fábrica».
- Porcentaje de personas que es capaz de marcharse antes de la hora y sienten que no tienen que dar explicaciones a nadie.
- Porcentaje de personas que tienen un libro sobre su mesa, además del material habitual de trabajo.
- Número de personas que comparten coche, bien para venir a la empresa o bien para irse.
- Porcentaje de personas que mantienen su entorno de trabajo «como si fuera el de su casa», en sentido positivo.
- Porcentaje de personas que son capaces de explicar el organigrama de la empresa y hacérselo entender a cualquier persona que se incorpore.
- Número de personas que son capaces de explicar a otra persona en qué consiste su trabajo y convencerles de que se trata de una actividad atractiva e interesante.
- Número de personas que participan en actividades de ayuda humanitaria, en un amplio sentido, al margen de su actividad profesional.
Este panel de mando es una alternativa más fiel para medir si las cosas van bien. Ah, bueno, ganar pasta es sólo la consecuencia. Pero esto ya lo mide todo el mundo. No tiene ninguna gracia.
11 comentarios
Me parecen unos indicadores estupendos, mucho más «indicadores» que los habituales. Aun así reconozco que tengo cierto repelus por los indicadores, ya que muchas veces solo sirven o se utilizan para demostrar lo que ya sé y para lo que no sé, no sé poner indicadores. O no quiero saberlo.
Además hay ciertas cosas que no se pueden cuantificar ni evaluar friamente (de un ámbito más emocional) pues terminan con la relación como decía Esteban Vicente: como rellenes un cuestionario diseccionador sobre tu relación de pareja, adiós a tu relación, por muy buena intención que medie.
Y es que la EFQM se basa en un modelo racionalista y numérico, donde todo tiene una explicación y un valor. ¿todo?
Estos nuevos indicadores son obviamente mucho más consistentes aunque también muy difíciles de medir, tal vez imposible.
Queda la pregunta del origen «¿cómo es que en algunos casos, estos nuevos indicadores tienen respuesta positiva?». O dicho de otro modo, ¿como hay organizaciones excepción, en las que -por ejemplo- aparece gente dispuesta a echar un cable gratuito?.
Intuyo que no es por azar, aunque tampoco el resultado de una decisión consciente.
Solo me queda la (pequeña)respuesta del ejemplo ¿Tienen los lideres buenas «puntuaciones» en estos nuevos indicadores que Julen propone?.
Estimados:
Cuando estaba en la organización que me abandonó, ésta quería mejorar la calidad interna. Bueno, el hecho es que la entidad rectora -asentada en España- quería que los indicadores internos, tuvieran numero azules.
En mi calidad de empleado, yo tome la iniciativa (http://santandersa.blogspot.com/
2006/01/el-llamado.html) y de ahí en adelante entendí que la nueva organización, ambientada para el mercaespacio, necesita de todo lo que no existe hoy, por ello éstos indicadores deben ser evaluados por una unidad de calidad que esté en el cotidiano y logre captar los cambios, los cuales se presentan en la subjetividad y en la precepción.
Si es que eso ocurre, imagínense lo que pasaría con los clientes. En todo caso, el libro Estrategias Digitales comenta que en el Valle de Silicio y en Ruta 128 esas condiciones ya se están originando. ¡Qué digo! hace rato funcionan.
Atte.
HSQO
¡Qué buena lista!
Hace poco tuve que entrevistar a un Director. Explicaba que su área funcionaba de maravilla. Le pregunté cómo lo sabía y me dijo: «porque los trabajos salen y se oyen muchas risas».
Con el tiempo que hace ahora, puedes añadir otro que a mí me parece bastante clarificador:
«Porcentaje de empleados que improvisan un pic-nic a la hora de la comida»
Me encanta Julen.
Dime como me mides y te diré como me comporto.
Me encantaría trabajar en una empresa que usase esos indicadores y otros parecidos.
¿Para cuando el libro de las ideas radicales? Si me lo dedicas compro uno. Y prometo hacer proselitismo.
Gracias a todos por vuestros comentarios. Cada uno ya sabe que hay otras maneras alternativas de saber si las cosas van bien. Relacionadas con el trabajo me viene a la cabeza lo que me solía decir el director de calidad de la empresa en la que trabajaba yo antes: «Julen, si me ves mucho por aquí, las cosas van bien». El asunto era que como director de calidad, el tiempo que pasaba fuera en clientes era por problemas de cierta consideración; así que si no tenía que viajar mucho mejor para todos.
En este caso, por tanto, podríamos añadir uno nuevo: porcentaje de tiempo que pasa aquí nuestro director de calidad. Claro que quizá sea un punto más aburrido que los estamos manejando aquí, ¿no?
Sonreid, que los demás os lo agradecerán.
¿Otro más? Porcentaje de gente capaz de tomarse el trabajo con calma -sin prisa, pero sin pausa-
Elogio a la lentitud
Es genial, ahora mismo lo comparto. Seguro que con la sonrisa que se me ha puesto en la cara he subido de golpe el indicador de nuestra empresa 🙂
[…] ¿Y qué hay de lo que tienes que hacer en tus horas de trabajo? Bueno, como eso es complicado de medir, mejor nos seguimos guiando por lo que dice el reloj. ¿Cuánto tiempo has estado allá dentro? Pues por eso te mediremos. La productividad utiliza el tiempo como vara de medir. Así que no te preocupes, ya sabes la unidad por la que dividirán lo que hagas… si es que pudieran medir lo que haces, claro. Los indicadores alternativos son pura fantasía. […]