En este blog ya lo hablamos en su momento: Los suicidios de Renault, Suicidios de Renault, segunda parte, y Suicidios también en Peugeot-Citröen. Por supuesto que soy un exagerado, que las personas afectadas por el mal de empresa son una inmensa minoría. En realidad la mayor parte de las empresas están repletas de personas que son consideradas como el activo más importante. Empresas que, por tanto, no se desprenden tan fácilmente de sus trabajadores. Ja.
Pero me temo que las empresas grandes funcionan como auténticos rodillos. Hace poco escuché a una persona de una gran empresa que tenía «prohibido» cierto comportamiento. Eso quiere decir que hay una verdad suprema incuestionable. Si estás dentro, la acatas. Punto final. No hay excepción, no hay forma de entender un caso individual. Hay una orden y hay que acatarla. Todos a una: ahí está la fuerza del grande. Machaca porque se sabe con la capacidad de hacerlo. Es la forma en que permanecer vivo como institución. También capaz de generar rencor en todo aquel que sufra el rodillo.
Buscando en Google France Telecom y suicidios obtienes 47.700 resultados. No es broma. Aunque los datos reflejen que son dos casos de cada mil, da miedo. Por las causas, por lo cualitativo, por las condiciones que lo posibilitan. Lo que da miedo es que la sociedad, a través de sus empresas, sea capaz de generar condiciones para que la gente piense que lo mejor es ir para el otro barrio. Es muy delicado establecer la relación causa-efecto. Las personas somos complejas e interpretamos las circunstancias de formas diversas. Cada cual filtra lo que filtra. Pero los hechos están ahí.
Es evidente que hay que tener en cuenta el punto de partida de una gran empresa como France Telecom. Pero puede ser cualquier otra. Cuando actúan con los grandes números sobre la mesa, la maquinaria actúa como un rodillo. Aparecerán perfiles suprimibles, perfiles a los que se ofrecerán cambios (movilidad geográfica, funcional o de otro tipo). El rodillo no sabe de nombres, no sabe de circunstancias personales, de dramas o alegrías familiares. Y esto no impide que se lleven a cabo entrevistas personales, cargadas de cosmética preocupación por la persona. Pero las condiciones no son negociables: el sistema proporciona los límites del campo de juego.
El «rodillo», el «sistema» no atiende a lo particular porque debe salvar el buque. Los daños colaterales se pueden y deben asumir para que el buque siga a flote. Y, ojo, que «a flote» no siempre significa «a duras penas», sino «con suficiente margen de beneficio». Porque el valor para el accionista es lo que es. Hay que trabajar para el amo.
En el primer mundo los dramas no tienen por qué afectar a miles de personas. Eso es para el tercer mundo. Aquí elaboramos mucho más el drama, lo pegamos al progreso, a las políticas de recursos humanos y a los incentivos. Inventamos patologías. Eso sí, no cabe la palabra «fracaso». Competimos por nuestra autoestima, personal y profesional. Y la asociamos a la mercantilización en la que hemos caído: nuestro salario, nuestro estatus, nuestro puesto de trabajo, nuestro coche, nuestro piso. Una dura batalla en la que los perdedores se suicidan. Sólo unos pocos, para que la decrepitud del sistema esté controlada, dentro de unos márgenes aceptables, como una especie de terrorismo de baja intensidad.
13 comentarios
Los suicidios laborales-económicos no son estadísticamente significativos en épocas de cirsis, como creo haber leído hace unos años, pero hacen reflexionar, como comentaba en Twitter.
Lo que no sé es si ese rodillo del que hablas es más intenso e inescapable en las pequeñas empresas con pocos trabajadores, donde si la cosa va mal y la relación con los compañeros no es buena, el ambiente se hace irrespirable mucho antes de los despidos y los problemas internos.
Es verdad que en las grandes empresas con problemas lo que si hay es más proyección mediática dada la relevancia socieconómica de los grandes ERES y similares, y esto se relaciona directamente con la atención social, que puede tener cierta influencia en estos desgraciados eventos.
En fin, un tema interesante a analizar..
Creo que habria que preguntarse si los suicicos laborales se deben a las politicas de empresa(rodillos) o a las relaciones sociales entre trabajadores.
Nunca se sabe donde puedes encontarte un compañero psicopata que te haga la vida imposible hasta el punto de plantearte llegar hasta el extremo del suicidio, pero un exposicion de larga duracion durante 8 horas al dia con personajes de estas caracteristicas puede llegar a minarte hasta limites insospechables.
Es un ejemplo límite de hasta que punto es dramática la diferencia entre una comunidad que tiene empresa/s y una empresa que busca tener comunidad. En el segundo caso la comunidad dura hasta donde dura. En el primero la herramienta es la empresa y las personas las que la usan, en el segundo las personas son herramientas.
Me gustó mucho una película (apta, reconozco, sólo para gente a la que le guste el cine porque tiene un ritmo desigual y es laaaaaaaaaarga) que trata el tema de restructuraciones laborales en una gran empresa francesa (mira tú): La question humaine
http://www.labutaca.net/films/58/laquestionhumaine.php
Uno de los temas? la deshumanización a la que los jefes de recursos humanos tienen al no entender a los trabajadores como «individuo», sino sólo como fuerza de trabajo.
La recomiendo, pero ¡conste que soy la única persona que conozco a la que le ha gustado!
Grrrrr… «la deshumanización a la que los jefes de recursos humanos tienDen al no entender a los trabajadores como “individuo”, sino sólo como fuerza de trabajo»
me se había quedado fuera una «D» 🙁
Aprovechando que el Pisuerga pasa por Pucela,y que habla francés esto de los suicidios en Le France
os recomiendo el libro,escrito por Francés,escribe en Le Monde,por si alguién le apetece leerlo,no tiene desperdicio,es un poco crítica despiadada a una forma de capitalismo extremo
el libro se llama
13,99 euros y es de Frederic Beigbeder,aqui hay una crónica del mismo
http://www.leergratis.com/libros/1399-euros-frederic-beigbeder.html
Una pregunta del millón,los pobres nunca suelen optar por el suicidio,y en muchos países y latitudes eso del stress suena a chino,bastante jodido es eso que tienen alli del vivir,
quizá todo esto son nuestras enfermedades de países supuestamente desarrollados y de sociedades supuestamente civilizadas,sigue siendo curuiso que Japón y Finlandia suelen seguir encabezando las tasas de suicidios.
Es duro y jodido lo del sistema,lo del stress,lo de la falta de estímulo laboral,la mercantilización de todo,el poder del sistema,el auge del tanto tienes tanto vales que fue el pan de cada día durante la etapa cultura del pelotazo Y QUE AHORA NOS DA LA TORTA rompiendo de lleno el sistema que algunos tenían o creían tener de bienestar.
Creo que van a venir tiempos duros….
salu2
Iván
@Yoriento, desde luego que es asunto interesante a analizar y complicado. En cualquier caso, el tema de fondo sería: ¿por qué la actividad profesional puede conducir al suicidio? ¿Qué encierra para que podamos llegar a esa decisión?
@mimuraka, desde luego que tus compañeros de trabajo conforman un entramado que te conduce para un lado u otro. Pero, al margen de las personas, ¿qué hay en la empresa que pueda conducir a suicidarse? Si alguien dice que esa es la razón, hay que parar y analizar. Es complicadísimo, desde luego.
@David, eso es, la «empresa» como herramienta al servicio de las personas y no al revés. 100% de acuerdo.
@Tona Pou, gracias por la referencia. Me ha venido a la cabeza otra película francesa que vi hace tiempo: Ressources humaines, también sobre circunstancias complicadas en una fábrica.
@Iván, qué estupenda reflexión la de que esto son «enfermedades del primer mundo». Al final cada cual interpreta de acuerdo con sus expectativas: si son muy altas y no se cumplen en absoluto, se genera riesgo.
Hoy he leido la noticia de un nuevo suicidio y la memoria me ha devuelto al 2009. Ya han pasado unos añitos y la verdad es que mi vision sobre este tema desgraciadamente es mas cruda.
Durante este tiempo he estado muy cerca de los recursos humanos del lugar donde trabajo y cada vez veo mas claro la deshumanizacion dentro de las empresas. Tambien tengo una persona muy cercana que vive situaciones bejatorias continuas dentro de una «gran empresa» y sus dirigentes miran para otro lado constantemente y hacen la vista gorda ante estas situaciones de acoso y menosprecio y lo que yo observo es que esta es la consigna de las personas que dirigen el barco, esta es la estrategia, lo que escapa de mi entendimiento es con que fin, porque ni pensando unicamente en terminos puramente economicos le veo la rentabilidad. Me da panico pensar en esos articulos donde dicen que un 10% de nuestra sociedad esta formada por psicopatas y que ademas sulen ser estos los que llegan mas lejos en las empresas y en los cargos politicos, pero esta es la unica explicacion logica que le doy a lo que me rodea, solo personas sin ninguna sensibilidad y cuyo disfrute sea el sufrimiento ajeno y su propio ego puede tener semejantes estrategias.
Tristemente esto que pasa en France Telecom son los resultados de una politica de empresa donde a la persona no se la ve como a una persona sino como a un recurso y para mas inri muy mal gestionado, es el resultado de una politica de empresa elitista donde por un lado se encuentran los directivos y por otro lado los «recursos».
Parte de culpa de que esto ocurra lo tenemos a los que nos denominan «recursos», ya que la respuesta no deberia ser la claudicacion, pero parece que no corren buenos tiempos para las reivindicaciones, parece que los tiempos que corren son los del recorte, el miedo y la satanizacion de las organizaciones de trabajadores.
Dejo aqui un link a unos parrafos del libro de John Steinbeck «Las uvas de la ira» que salvando distancias de la epoca y que por lo que se luchaba entonces era por un trozo de pan y ahora por la digniad de los trabajadores, creo que puede reflejar el espiritu, o al menos a mi me lo parece, una situacion a la que actualmente vivimos.
http://www.fotolog.com/0meri_cherry0/10217948
[…] por el desarrollo profesional de las personas. Con algún que otro problemilla de suicidios, de stress laboral o de nuevas enfermedades profesionales en general, el sistema continúa […]
Yo pienso que el suicidio no es la solucion a muchos problemas ya que vemos muchos casos de gente que se matan o se suicida ya que la vida es valiosa y hay que valorarla ademas tengan en cuenta que las personas que se matan o se suicidan se van al infierno porque el unico que te da la vida es Dios y el es el que te la quita asi que el suicidio no es la solucion a muchos problemas tu no puedes decidir por tu vida…
[…] cada momento. No tiene un destino, el genio se hace. Puede torcerse, oscurecerse, volverse incluso mortal para quienes la habitan. Pero también puede estilizarse, crecer, estirarse hasta convertirse casi […]
[…] capta atención en los telediarios. Por supuesto que también en negativo, faltaría más. Sea por suicidios o por cualquier otra salvajada. Al contrario, cuando tienes una microempresa, Consultoría Artesana […]
[…] cada momento. No tiene un destino, el genio se hace. Puede torcerse, oscurecerse, volverse incluso mortal para quienes la habitan. Pero también puede estilizarse, crecer, estirarse hasta convertirse casi […]