Se me agolpan unas cuantas ideas revolviendo mi cerebro en torno al wikiST de la semana que viene en torno a la producción ciudadana de estándares. Me parece que tras la primera reflexión, aterrizo mejor con esta segunda.
Cuando hablamos de estándares, hablemos de estándares para comunicarnos. Si no hay un lenguaje hablado o escrito común tenemos las señas, los gestos, la comunicación no verbal, pero aquí también hay limitaciones (pregunta cómo se dice sí y no en Bulgaria). El mundo funciona con estándares visuales y es útil para la comunicación. Es una idea.
Por encima del nivel de los gestos y lo visual, está el lenguaje, en forma de idiomas. Y hay estándares para el lenguaje. De eso hablé en el otro artículo. Si hablamos el mismo idioma, tenemos un estándar, que acalla muchas especifidades, pero, a fin de cuentas, existe el estándar. Y es útil para la comunicación. El estándar uniformiza, pero es útil. La palabra es la referencia para comunicarnos y podemos producirla mediante sonidos o hacerlo por escrito. Ni más ni menos que la raya que separa la prehistoria de la historia.
Pero la comunicación oral es poderosa porque pone en contacto directo a los humanos. En la situación cara a cara la persona despliega toda su potencia comunicadora. Voz, gestos, silencios, tonos, cuerpo en movimiento. Hay un estándar que nos acompaña y que muestra bien a las claras si comunico enfado, alegría o tristeza. Es nuestro cuerpo. Esta corporalidad cada vez es más analizada.
Pero llegó el ciclo hype de la tecnología. Tecnología a raudales. Aquí vamos a pararnos en los wikis. ¿Hemos llegado a algún estándar? Sí, hay un mínimo tecnológico por detrás. Un botón edit y un botón save. Inglés, que es el estándar del planeta en la comunicación mediada tecnológicamente, no lo olvidemos. Pero luego el wiki se habla en muchas diferentes lenguas. Y no tenemos lenguaje de signos que nos ayude. El estándar está en barrios con cierta predisposición tecnológica. Hay que bajar al primer peldaño, hay que bajar a la casilla cero del juego de la oca. No podemos dejar atrás a tanta gente.
El estándar en la comunicación que se da cuando compartimos tiempo y espacio era la conversación cara a cara. ¿Estamos perdiendo ese estándar para ir a otro en el que la conversación está mediada por la tecnología? Aquí interviene el principio universal de la economía, una derivada del principio de la Navaja de Occam, ese por el que los humanos somos vagos hasta decir basta. KISS. Hago lo que menos me cueste. Además, el correo electrónico al vecino de despacho porque así «hay constancia» de que se lo he dicho. Otro gran problema: me defiendo a través de la huella digital que probará que yo tenía razón.
¿Estamos derribando un estándar de lo privado para acercarnos a un estándar de lo transparente? El Gran Hermano Google capaz de rastrear toda interacción digital viviente cambia el estándar. Ahora el estándar se desplaza hacia la comunicación mediada por la tecnología. Pero si el estándar es la estadística, ¿cuánto existe al margen de Google?, ¿cuánta comunicación se da entre personas mientras Google es y será incapaz de rastrearla? Google es tonto y lo hemos endiosado entre todos.
Pero mi vecina del quinto sigue fuera de Googlelandia y mucha gente, la gran mayoría, es capaz de vivir fuera de ese país. Unas personas, rebasadas por una tecnología que las ha agredido. Como elefante en una cacharrería ha pretendido entrar en la vida de humanos que sólo querían un botón para descolgar el teléfono y otro para colgar. Sí y con números bien grandes para teclear bien. Nada más. Bendito laboratorio de la simplicidad del MIT. Qué lejos de la realidad. ¿Cuánta tecnología me das que yo nunca usaré? Me estás agrediendo.
Globalización, estándares, uniformidad, eficiencia, recta como distancia mínima entre dos puntos, tiempo que es oro. Hubo un tiempo sin teléfonos móviles y sin ordenadores y sin Google y sin Internet. Los nuevos estándares, ¿son el progreso? Comunicación a cien por hora. ¿Quién disfruta del viaje?
5 comentarios
Conseguir estándares en la comunicación puede resultar fácil desde el punto de vista teórico, pero presenta importantísimos problemas prácticos.
Hemos de partir de un dato relevante cual es el de la imposibilidad de haber alcanzado una estandarización de la comunicación verbal (ej. esperanto). Aun cuando hay lenguas predominantes (inglés, castellano, chino mandarín, etc)la torre de babel sigue existiendo.
Ahora, inmersos ya en el mundo de las tecnologías, el problema puede que se esté acrecentando, ya que excluyendo a los nativos, el ciudadano de a pié se encuentra con graves problemas de comprensión de los términos (compuestos por anglicismos en la mayor parte de los casos) jergas propias de los profesionales informáticos, palabrejos varios. etc.
Hemos de pensar que a una gran parte de la población, ni le gusta, ni está cómoda con la alta velocidad tecnológica, y simplemente recurren a lo sencillo. ¿hay muchos ciudadanos que disfruten de este viaje de alta velocidad?. No todos somos Fernando Alonso.
Mientras leía tu artículo pensaba que la comunicación es una forma de amor (y de unión entre personas).
Si yo amo a los que tengo cerca, intento buscar con ellos una forma de lenguaje que me facilite comunicarme con ellos. Lo mismo hacemos en sociedad.
La cultura parece eso, un buscar formas sencillas de comunicarnos y compartir la salsa de la vida.
La sencillez es la llave del amor y la llave de la comunicación respetuosa con los otros.
Y me parece que la informática, el internet, los wikis, … son por ahora herramientas de comunicación que se han complicado demasiado. Para mi buscar estándares de comunicación en la web 2.0 es entre otras cosas buscar formas de simplificar y hacer usable por casi todo el mundo estas herramientas.
Pienso por ejemplo en la comunidad de videobloggers de YouTube, muchos de ellos no saben casi nada de tecnología, encienden la webcam y se graban directamente, porque eso lo han aprendido, y ven lo que han grabado sus amigos y conocidos de internet. Los estandares son sencillos y los han ido creando entre ellos, a veces preguntando. Y nos vemos la cara unos a otros, charlamos, dejamos comentarios, y nos enviamos vídeo respuestas.
Yo me pregunto si podemos partir de los hábitos y la cultura comunicativa normal de las personas, con audío, video, texto, … y llevarlas de forma natural a internet. Porque creo que aun esto no ha llegado.
Paciencia. Todo se andará, y espero que los Bill Gates, Googles y demás se den cuenta de que la informática a muerto, y lo que queda es unos sistemas (a simplificar cada vez más) que permiten la comunicación normal entre personas.
Por eso, me parece un buen paso lo que ha hecho Apple con el iPhone, pues ha creado una herramienta y unos sistemas supersencillos para que cualquier persona pueda comunicarse o navegar por internet. Su simplicidad es impresionante, infinitamente mejor que el windows mobile. Saludos
A ver si me entero. ¿Qué significa la palabra «Estándar»? ¿Es un sustantivo o un adjetivo? Las dos cosas, vale. Pero en sustantivo significa una cosa y en adjetivo otra, y creo que estamos mezclando todo.
Según el Collins,
– Standard (n): medida, pauta, norma, patrón, regla,…
– Standard (adj): normal, corriente, oficial, vigente,…
Por tanto, hablamos de cosas diferentes cuando mencionamos «estándares de comunicación» (¡Normas?) o de un «lenguaje estándar» (lenguaje oficial, como el esukera batua).
Ahora bien, cuando dices que el cuerpo es un estándar en la comunicación, ahí sí que me pierdo. ¿Qué quieres decir? ¿Que es una medida, una regla, un patrón? ¿o que es algo oficial, corriente, vigente? Es que para mi ninguna de las acepciones tienen sentido. El cuerpo y la corporalidad son parte de la conversación, igual que el lenguaje (sea cual sea), los sentimientos y creencias, la espiritualidad, las experiencias y demás de las personas que participan en la conversación.
La comunicación jamás estará medida por la tecnología; la tecnología no puede ser un estándar. Podrá estar soportada en ella, pero la calidad de una conversación o comunicación (igual que cualquier otro producto) la mide el participante directo, el usuario (es decir, el cliente), no la herramienta o el creador de la herramienta.
O sino, estamos hablando de cosas diferentes.
Julen, tu y yo necesitamos un CONSENSO (y no un estándar) en cuanto a ponernos de acuerdo sobre de qué estamos hablando al hablar de un «estándar»
Quizás te sirva esta frase que escuché el otro día en la radio: «El lenguaje es el sistema que tenemos las personas para no entendernos».
Si es así, esto parece todo menos un estandar ¿no?
Guillermo, ni queremos ser Fernando Alonso 😉
Nacho, no cabe duda que la simplicidad es una de las claves para conseguir estándares de comunicación eficaces entre personas. Buena reflexión.
xapi, gracias por rebatir, que así le damos más vueltas. Vamos por partes.
Fíjate que en la función sustantiva dice «norma» y entre las que describen la función adjetiva aparece «oficial». No están tan lejos, ¿no?
Cuando digo lo del cuerpo me estoy refiriendo a que hay un estándar que a veces parece y no lo es. Por ejemplo si mueves la cabeza horizontalmente de un lado a otro, me estás dicienco que no (pero en Bulgaria es que sí, por ejemplo). Hay que tener cuidado porque sigue habiendo diferencias. No es tan estándar como parece. Pero, por otro lado, tu cuerpo puede mostrarse como un estándar en tanto que sigue un patrón común: si lloras estás triste, si te ríes estás alegre, si levantas las cejas demuestras cierto asombro…
Seguimos hablando para llegar a consensos. O también pudiera ser que no llegáramos a ellos, ¿no?
Josu, has visto la parte medio vacía 😉