Este 23 de junio debía pedalear en la Quebrantahuesos. Era mi intención. Sin embargo, no lo haré. No he encontrado en ningún lado de mi ser la motivación para ello. Y mira que puse medios:
- planificación detallada, que luego incumplí
- prueba de esfuerzo, como punto de partida
- adecuación de la tecnología, mejorando mi bici de carretera
- calendario de marchas cicloturistas de preparación, del que sólo cayó la Bilbao-Bilbao
Pero faltó lo más importante: la motivación de quien iba a dar pedales. Y mirando ahora para atrás, me permito una sencilla reflexión sobre la motivación de los humanos. Perdonad si es una de esas reflexiones baratas. Pero todo esto lo hago pensando también en dónde está la clave para que rindamos y nos sintamos a gusto.
Las cosas importantes salen de dentro. Los grandes resultados de las personas tienen que ver con su convencimiento personal. Si sucede que haces conexión contigo mismo, entonces estás en la mejor de las condiciones para rendir. Pero, más todavía, en caso de que no rindieras, incluso puedes también sentirte a gusto contigo mismo. Tiene que ver con una extraña conexión interior que te conduce a un estado positivo.
Las empresas se afanan en mejorar sus procesos, en introducir tecnologías que revolucionen el campo de juego, en buscar modelos de gestión excelentes. Todo es más sencillo. Tiene que ver con que sus personas encuentren la conexión interior con lo que les gusta, con lo que les motiva. Ni plan de reconocimientos ni retribuciones individualizadas, la conexión íntima es la principal mecha del rendimiento. Y la mayor parte de las empresas no tienen ni idea de qué va esto.
Cada vez estoy más de acuerdo con los planteamientos de Richard M. Ryan y Edward L. Deci acerca de lo que se suele llamar SDT: Self-Determination Theory.
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5 comentarios
Vamos, que de poco sirve decirle a alguien lo que tiene que hacer, ya sea en el trabajo o en la familia. Es una pena, con la cantidad de gente aficionada a resolver los problemas ajenos.
Tal vez estés finalizando el ciclo bicicletero porque vas a empezar otro ciclo más interesante.
«<"ironia">« ¿En que capitulo de la contabilidad analítica se realiza el apunte de esto de la «motivación»?… «<"/ironia">«
germán, el ciclo de bici sigue ahí, pero no en plan carretera. Creo que la cabra sigue tirando al monte 😉
telémaco, me parece que no lleva apunte, me temo.
Coño, ahora entiendo porque cuando hago lo que me gusta, en lugar de lo que me mandan (que no siempre coincide), rindo más y mejor 🙂
Saludos. Iñaki.
«Las cosas importantes salen de dentro». Pero vinieron de fuera..
🙂
Si es difícil conciliar motivación y trabajo, en parte es porque los motivadores laborales no se parecen mucho a los que desarrollamos en contextos «personales».
Otra cosa es que a veces organicemos todo para tener ganas, luego no haya ganas suficiente…Pero eso es un problema de planificación, no de motivación¡ 🙂