Luarca-Lisboa por la costa #MTB

Actualización 21/05/2022.-

Repasando con más detalle las opciones que ofrece el Camiño Natural do Cantábrico  y la adaptación del Camiño dos Faros para bicicleta de montaña no descarto algún cambio de planes. Tengo que «estudiar» mejor la ruta y contar con el consejo experto de Dabid (sin olvidar a Andeka, jejeje) para ver cuál es la decisión final. La ruta que hicieron hace un par de años es toda una referencia.

No me cabe duda alguna de que quienes vivimos en la Península Ibérica somos gente privilegiada. Sobre todo, si el caso es, como me sucede a mí, que te gusta pedalear. Hace solo cosa de un mes lo pudimos comprobar en una ruta, #BajoEbroMTB (con su ebook disponible, por cierto), que en apenas dos semanas nos permitió visitar monasterios cistercienses, rodar por montañas mágicas, entender el aislamiento y la despoblación, disfrutar de parques naturales en la montaña y en la costa, o darnos de bruces con el desarrollismo turístico de la costa mediterránea. Todo en 13 jornadas a lomos de nuestra Orbea Oiz.

Fue volver a casa y pensar en el siguiente proyecto Rodamos Suave Suave. Portugal sigue siendo un lugar que me atrae especialmente. El año pasado me trajo momentos fantásticos sobre la bici recorriendo las Aldeias Históricas. Por otra parte, Galicia es quizá la comunidad autónoma por la que menos he pedaleado. Al margen de mis varias rutas con destino a la tumba del apóstol en Santiago de Compostela, poco más he rodado por allí. Galicia, Portugal. Pues manos a la obra. Tras varios días de mirar tracks y buscar alternativas, ya tenemos un primer diseño de la que espero sea la ruta de este verano. Necesito todavía hacer el hueco en la agenda porque tengo bastantes compromisos de trabajo en julio, pero espero que se puedan alinear los astros y sacarme 20 días, desde el 16 de julio hasta el 4 de agosto.

El plan es seguir la línea de costa desde Luarca, en Asturias, hasta Lisboa. Luego, desde allí pedalear hasta Badajoz, donde cogería un autobús de vuelta a Bilbao. La ruta empleará tramos de diferentes vías del Camino de Santiago, de la Eurovelo 1 y otros que he diseñado por mi cuenta a partir de cartografía digital. El objetivo es ir pegado a la costa todo lo que se pueda. Y sí, por supuesto, que la costa es diversa, muy diversa, a lo largo de los casi 1.500 kilómetros que en principio pedalearé desde Luarca hasta Lisboa. Hace unos días, comentando el plan con un amigo, me decía que le sorprendían los desniveles de algunas etapas, teniendo en cuenta lo dicho, que vamos pegados a la costa.

Por ejemplo, las nueve etapas que he diseñado en el tramo gallego, desde Ribadeo hasta Vigo, promedian 1.500 metros de desnivel acumulado diario. Eso quiere decir que las hay que casi llegan a los 2.000 metros. Incluso había alguna que al principio se me iba a los 2.300. De momento, con el diseño actual, la que supone un mayor desnivel es la que me llevará de Muxia a Mazaricos: 1.977 metros de desnivel acumulado.

Como siempre, iremos combinando caminos, pistas y carreteritas. O sea, lo que haga falta. Además, habrá que echar mano de varias barcazas para avanzar en la ruta. Por ejemplo, para cruzar la frontera entre Galicia y Portugal, desde A Guarda a Caminha, o ya en Lisboa, para atravesar la desembocadura del río Tajo. Por otra parte, la ruta nos hará pasar por ciudades como A Coruña, Pontevedra, Vigo, Oporto o Lisboa. Tengo previsto hacer noche en estas tres últimas. Así que volveré a pedalear por aquel fin de ruta que en 2016 me llevó de Sagunto a Oporto en uno de los viajes de los que tengo mejor recuerdo. En cambio, será la primera vez que podré pedalear por Lisboa, una ciudad en la que hace ya tiempo que no he estado.

En fin, este es el plan. Todavía quedan casi un par de meses, pero la ruta la tengo ya diseñada a un 90%. Porque otra cosa no, pero de verdad que me encanta ir mirando los mapas y ver las distintas opciones para elegir el track que me parece mejor. Luego, como siempre, de vez en cuando habrá que improvisar. Pero para eso son los planes: para disfrutarlos mientras estás en ello a sabiendas de que siempre habrá imponderables que escapan a nuestro control y que, por supuesto, esos imprevistos también añaden alicientes al pedaleo.

Como queda tiempo aún, ya daremos más detalles cuando se acerquen las fechas. Pero dicho queda: la intención es recorrer la costa desde Luarca hasta Lisboa. Suave suave 🙂