Warning: Undefined variable $post_id in /home/consult2/public_html/wp-content/themes/soledad-child/header.php on line 50
¿Necesito orden para trabajar mejor? – Consultoría artesana en red

¿Necesito orden para trabajar mejor?

by Julen

Hace poco leía en Genbeta un artículo firmado por Marcos Merino que ponía sobre la mesa algo realmente interesante: Los jóvenes no comprenden cómo funciona el sistema de archivos: ¿Carpetas? ¿Unidades? ¿De qué me estás hablando? Venía a cuento de otro texto publicado en The Verge, un medio norteamericano, en el que varios profesores se extrañaban de que su alumnado no guardaba sus ficheros en carpetas. Simplemente los guardaban allí donde el software lo quisiera hacer. Cuando tenían que echar mano de ellos usaban el buscador. Un giro copernicano en nuestra estructura mental. El mismo Enrique Dans se hacía eco y publicaba también su reflexión al respecto.

Hace unos días me pasó que tuve que enviarle a una alumna su trabajo fin de grado en curso porque no lo podía encontrar. Argumentaba problemas para acceder a su cuenta en la universidad. Como os lo cuento, le envié su propio documento para que siguiera trabajando en él. Así que a lo mejor esto no es tan infrecuente como pudiéramos pensar.

Quienes leéis este blog ya sabéis que una de mis líneas de trabajo son las 5S digitales. Ahí, esto de buscar un sitio para cosa y que cada cosa tenga su sitio es innegociable. Desde luego que renunciar a crear cajones para guardar contenidos es una vuelta de rosca para la que, me temo, mi generación no está preparada. Me resulta mucho más sencillo pensar que tengo que aprovechar lo mejor de los dos mundos:

  1. Las herramientas de búsqueda son fundamentales. Sea a través de lo que ofrecen los sistemas operativos o incluso mediante otro software específico, buena parte de mi efectividad en el manejo de información pasa por ser competente en este ámbito.
  2. Mi trabajo exige una determinada estructura mental que procuro reflejar en los cajones que veo al guardar ficheros, correos electrónicos o tareas. Es una lógica que me ayuda a dominar de alguna forma lo que implica mi actividad profesional.

Mientras escribo esto creo entender que si hubiera nacido en este siglo a lo mejor dispondría de otra manera de entender cómo se organiza la información. Seguramente que imágenes y vídeos ocuparían mayor ancho de banda en mi estructura mental y eso tendría su repercusión en cómo organizo esa información. Además, el mismo concepto de «fichero» y «carpeta» podría admitir muchos matices. ¿La tecnología me podría organizar?, ¿podría delegar en ella esta función tradicionalmente humana? Google y compañía lo tienen claro: para los GAFAM de turno cuanto menos intervengamos mejor. Ellos ya se encargan de organizarnos la vida. Lo tienen (casi) todo de nosotras. Pues más leña al mono.

¿Estamos ante un ejemplo de downskilling por efecto de la tecnología? ¿Necesitamos sí o sí clasificar y organizar nuestro conocimiento, nuestras actividades; en definitiva, nuestra información? No hay duda de que este mundo presente se ha licuado. Bauman ya nos vino avisando. Los cajones casan mal con poder contener elementos que se han licuado. Hay fugas por todas partes, cada vez cuesta más dotarnos de estructuras más o menos fijas. La que servía ayer deja de serlo hoy. ¿Merece la pena este esfuerzo por aprehender la realidad?

Reconozco que en los proyectos de 5S digitales con que me encuentro, mucha gente sufre una desorganización que repercute evidentemente en una productividad personal y de equipo deficiente. A vees incluso percibo cierto derrotismo. Algo así cómo que es imposible organizarse con este volumen de información actual. En 5S digitales siempre insistimos en que menos es más, que mejor simplificar, que hay que llevar a cabo un ejercicio de asertividad. No hacer nada y dejar que la tecnología nos eche una mano no parece que sea suficiente. No sé si para las generaciones venideras esto cambiará, pero a día de hoy me temo que un trabajo en equipo efectivo pasa por organizarse.

En cualquier caso, como dice Enrique Dans, «como mínimo, interesante» esta forma de «no organizarse» que comenzamos a ver en la gente joven.

Imagen de Pexels en Pixabay.

Artículos relacionados

6 comentarios

Venan 04/10/2021 - 13:00

Creo que no se trata tanto de un downskilling como un cambio de manera de trabajo en función de las necesidades. Pongo un ejemplo: aprendí a conducir en un coche sin dirección asistida, sin ABS, ESP, cambio manual de 4 velocidades (la cuarta era la “directa”, con retrovisores manuales. Los elevalunas eran manuales y no había ni aire acondicionado ni climatización. Nos hemos acostumbrado a ello, podríamos volver al sistema antiguo? Sí, una cosa no quita la otra.
Lo mismo nos pasa a los viejunos con el sistema de almacenamiento de DOS, ocho caracteres más una extensión de tres, organizando la información en directorios con estructura jerárquica. Tal vez esa herencia nos haga ser dependientes de ese esquema y sin embargo las nuevas generaciones no sean dependientes de ello. Nosotros hemos de aprender de ellos y ellos a su vez, de nosotros. Nada es blanco ni negro, tomemos lo mejor de ambas.

Responder
Julen 06/10/2021 - 08:25

Habrá que coger lo mejor de los dos mundos… que lo mismo son ya solo uno 😉

Responder
Toñi 05/10/2021 - 20:13

Vamos a ver, si algunos no ordenan ni su ropa difícil que ordenen algo más….

Responder
Julen 06/10/2021 - 08:25

Jejeje, es una fase en la vida: el desorden en su habitación 🙂

Responder
amalio rey 06/10/2021 - 10:14

El debate no está tanto en qué sistema es más cómodo (vamos a tender siempre al más cómodo que nos ofrezcan, y ya sabemos cómo funciona, y en manos de quiénes está el «diseño adictivo»), sino cuáles son los efectos colaterales de renunciar a entrenar la capacidad de estructuración de contenidos. Eso que llamas «buscar un sitio para cosa y que cada cosa tenga su sitio», que puede sonar a un skill viejuno, tal vez sea una capacidad que sirva fuera del uso de los buscadores automáticos, ¡¡o no!! Yo me lo planteo más como duda que como certeza y encaja con un tema al que le dedico casi un capítulo entero de mi (futuro o probable) libro y que me gusta llamar la «la paradoja del atajo tecnológico», o sea, esos atajos que estamos tomando por comodidad (y empujados por el diseño adictivo) que parecen estupendos pero que pueden llevarnos a la ruina en el futuro por atrofiar «músculos» que son clave para el desarrollo integral de los seres humanos. Ahí lo dejo.

Responder
Julen 18/10/2021 - 11:56

Conste, Amalio, que cada vez me da que va a haber más tecnología implicada de la que «no nos demos cuenta». Me temo que esto va a ir a más, como, por otra parte, es lógico. Eso sí, ganaremos y perderemos. Lo importante es la toma de conciencia sobre el hecho en sí.

Responder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.