De Sanlúcar al diluvio

by Julen

Nota.- Post escrito desde el móvil

Bueno, en realidad hemos terminado con un sol imposible de concebir a lo largo de cualquier momento de la mañana. Ni el más optimista, o sea Alberto, que se ha venido con su traje de baño, hubiera sido capaz de imaginárselo. Pero a las seis de la tarde ahí que estábamos paseando por la playa de La Barrosa, viendo las piruetas de las estrellas del kite surf local.

El día empezaba a las ocho tras unas tostadas (tostadas enteras, que no medias) en un bareto surrealista con mezcla de Semana Santa y Marilyn Monroe. Nos hemos encontrado luego con Fran, Carlos y Jose, además del arco iris sobre el Guadalquivir. Nos han acompañado hasta Puerto de Santa María, donde ha cogido el relevo Jaime. Hoy todo un lujo con acompañantes transandaluseros de postín.

Primeros kilómetros agradables por la vía verde de Chipiona aderezada con unos buenos baches y algún que otro resto de invernadero guarro guarro. Cháchara primero con Fran, luego con Carlos (vaya crack de la cartografía digital) y también con Jose. Este tramo, cómo no, ha terminado en la Parrilla Venta Las Tinajas. Esta gente del sur se ha dopado con unas tostadas de manteca, pero sin zaparra. Bah, unos flojos estos lugareños :-p

El caso es que ha sido salir de Las Tinajas y ¡zas! Toma chaparrón… hasta final de etapa. Para darle más emoción Carlos ha decidido que la cámara de su rueda delantera necesitaba más presión mientras los demás nos empapábamos medio kilómetro más adelante esperándole. A todo esto con la incorporación de un espontáneo que nos ha hecho conformar un sexteto de ciclistas.

Llegamos a Puerto de Santa María… santa maría madre de dios la que caía. Chuzos de punta. Jaime nos esperaba en el muelle del vapor con toda una jauria de jubiletas resguardados de la lluvia como buenamente podían. Abrazos y apretones de manos, pero sin una triste caña ni unas gambas que llevarse al paladar. Nos hemos despedido de Fran, Carlos y Jose, que han vuelto para Sanlúcar mientras Jaime ha tenido el detallazo de acompañarnos unos kilómetros por un caminito precioso a través de la marisma bajo el diluvio universal.

Una charla con Jaime me ha hecho descubrir su proyecto de recorrer en bici algunas islas comenzando por La Palma. Curiosas conexiones porque aquí el que escribe comparte afición junto a Boquitas Pintadas por territerios isleños. Tiempo tendremos de compartir experiencias.

Luego de despedirnos de Jaime atravesamos Puerto Real por su paseo marítimo para afrontar la última parte del tramo de hoy. En poco más de una hora estábamos metiéndonos un buen menú cerca de la playa de La Barrosa muy cerca de nuestro hotel. Y tras el diluvio, sol y cielo azul. Caprichos de la costa gaditana. Incluso ha dado tiempo para un paseo. Eso sí, ahora mismo, desde aquí en el hotel se ven unos nubarrones más negros ahí enfrente…

Artículos relacionados

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.