Consultoría abierta con ZEMOS98 – Gestión Creativo Cultural

by Julen

Antes de las vacaciones Felipe G. Gil, de ZEMOS98, se puso en contacto conmigo para plantear lo que llamaba una «idea peregrina». Copio/pego el primer párrafo de ese correo porque me parece muy interesante la reflexión:

El año pasado en el curso de «sociedad-red» impartido por la UIMP en Barcelona, durante la exposición sobre los cambios en las organizaciones a raíz de «lo 2.0» le hice una pregunta a Enrique Dans que no supo contestar. Él estaba explicando cómo su trabajo consiste en evangelizar a empresas 1.0 en hacer el cambio hacia lo 2.0. dejando de lado el debate sobre la reducción y estereotipos asociados a estos términos (lo uno punto cero, lo dos punto cero, lo nueve punto ocho..), mi pregunta iba encaminada a intentar entender la realidad de nuestro proyecto, ZEMOS98. Y le dije: ¿y qué hay de una organización que comenzó en el ámbito asociativo, con una estructura rizomática y horizontal, que con el paso de los años ha sufrido un proceso inverso, es decir, de verticalización, jerarquización, etc.?

Interesante, ¿verdad? Quizá sea que «lo 2.0» navega en aguas enemigas y que a poco que se descuide acabará fagocitado, quién sabe si por falta de autenticidad. Y es que una organización que crece puede que no se desarrolle. No son verbos que quieran decir lo mismo. Crecer es cantidad, desarrollarse es calidad. Y tenemos que tener en cuenta que son muchas las personas expertas que hablan de que el tamaño natural de un equipo eficiente son 5-7 personas. Más personas, más organización.

Zemos98logo2Crecer genera regulación. Lo que funciona en tácito para tres personas no funciona para diez. Así pues el esfuerzo por explicitar va ganando terreno. La necesidad de símbolos y de anclas crece para distinguir a quienes «son de los nuestros» de quienes no lo son. La transparencia y la fluidez se topan con la necesidad de «organizarnos». Y vamos directo hacia la sobreorganización.

Por otra parte, la actividad de ZEMOS98 gira en torno a la cultura, ese oscuro objeto de deseo con el que -también- hacer dinero. Cultura esponsorizada, cultura inserta en nuestra hipereconomía, cultura que consigue subsistir retroalimentada por el consumo.

Creo que una referencia fundamental para entender ZEMOS98 es la lectura de este artículo: ZEMOS98 – Gestión creativa cultural. Junto a él, un pdf detalla unas pocas cosas más sobre la marca y un video lo narra desde aquellos primeros tiempos pegados a Viso del Alcor.

Cuando Felipe me dijo que le gustaría que trabajáramos juntos, lo primero que pensé es que merecía la pena que nuestras reflexiones fueran públicas. Primero, porque creo que podemos encontrar ideas en el camino que ayuden a descubrir alternativas. Segundo, porque obliga a asumir una responsabilidad social: la de ser coherente con una identidad abierta y permeable, que se va a recrear en el camino.

Así pues, de vez en cuando verás que este blog y por el de ZEMOS98 cruzaremos reflexiones. ¿Es consultoría que yo llevo a cabo como proveedor? No sé muy bien si soy proveedor o cliente; en cualquier caso no en la fórmula tradicional. No sé si tengo que cobrar por este trabajo por mucho que me insistan en cuáles son las tarifas.

De momento les he propuesto un guión que puede sufrir modificaciones según cómo avancen los acontecimientos y cómo se sientan actrices y actores en los papeles que van asumiendo. Para que veáis cómo queremos trabajar, hago también un copia/pega del correo que remití a Felipe hace ya un tiempo y que explica la base de nuestra colaboración.

A mí me encantaría poder colaborar con vosotros. La cuestión, como bien dices, es encontrar la forma. Ahora mismo no se me ocurre la manera, pero no lo dejo caer en saco roto. Una idea que podemos manejar desde el principio es la de abrir nuestra reflexión. Quiero decir que estas preguntas que te haces, nos las hagamos «en público» y busquemos explicación desde la colectividad. Me explico.

La mayor parte de las veces en las que una organización busca «explicaciones» quiere hacerlo «en privado». Sus problemas son suyos y de nadie más. No le ven sentido a compartir con la comunidad. Pero puede que con otros modelos -quizá el vuestro puede ser un ejemplo- tenga más sentido abrir una reflexión «colectiva». Mira por ejemplo lo que David de Ugarte hace respecto a las Indias Electrónicas. Escriben sobre su modelo, lo «explicitan» porque eso abre la puerta a una reflexión colectiva más allá de la que ellos pueden provocar si lo dejan dentro de sus cuatro paredes.

¿Por qué no abrimos una reflexión sobre vuestro modelo y la compartimos? Podríamos hacer un pequeño inventario de los temas sobre los que hablar. A partir de ahí podemos trabajar así:

  • Escribimos reflexiones que expliquen cómo funcionamos ahora y dejando preguntas con respuestas posibles. Yo puedo hacerlo en mi blog y vosotros allí donde lo estiméis oportuno. Abrimos la reflexión y perfilamos una especie de «consultoría colectiva».
  • Complementamos con reflexiones cara a cara de formato más reducido, que podríamos hacer bien presencialmente o usando skype u otras formas que nos eviten muchos desplazamientos (lo cual no obvia para quedar algún día, por supuesto).
  • Devolvemos feedback al espacio público para compartir la evolución y lo que vayamos decidiendo.

De esta forma podemos avanzar sin burocratizar mucho el proceso. De la misma forma que los blogs nos podrían ayudar a generar conversación, podríamos usar una wiki como «repositorio de conclusiones» que luego podrán ser mejoradas pero que ya dejan un «poso» interesante.

Claro que necesitaríamos una reflexión más o menos ordenada sobre vuestro modelo actual. ¿Está escrito en alguna parte?, ¿lo podemos deducir de ciertos documentos que ya tengáis? En esa reflexión inicial podemos manejar un esquema sencillo para ir escribiendo, por ejemplo, acerca de estos aspectos:

  1. El propósito, la idea que nos aglutina: qué queremos hacer y para quién. Cómo fue, cómo es, cómo podría ser. ¿Podemos elaborar un mapa mental? Conviene hablar de nuestros «productos/servicios» (con un concepto muy amplio).
  2. Cómo nos organizamos para conseguir ese propósito: cómo tomamos decisiones, cómo nos coordinamos, ¿planificamos?, ¿evaluamos?, ¿llevamos control sobre nuestras actividades?, ¿cuál es nuestro modelo organizativo?, ¿queremos crecer?, ¿cómo crecemos?
  3. Cómo interactuamos con nuestro entorno: conexiones, captación de proyectos, actividades de comunicación y marketing, aguas arriba (proveedores)
  4. Nuestro conocimiento y el de nuestra red: de qué sabemos, de qué deberíamos saber, quiénes saben de lo que sabemos, dónde están, ¿tenemos documentado ese conocimiento?, ¿en qué soportes?, ¿cómo está de accesible y reutilizable?, ¿generamos espacios para trabajar tácito y explícito?
  5. Las personas que somos: qué roles, qué perspectivas, con qué valores, con qué grado de diversidad…
  6. Modelo de ingreso y análisis de costes

También podemos manejar nuestro modelo de empresa abierta, que plantea:

  1. Un primer análisis de ciertos elementos de la sociedad actual y cómo nos afectan. Se podrían repasar.
  2. Después plantea tres hipótesis sobre la organización actual, que también podrían analizarse.
  3. Por último propone repasar una serie de características que creemos útiles para una organización abierta y que pueden ayudarla.

Para todo esto tenemos un «guión» que podríamos utilizar.

Estamos al principio del viaje. Abramos las ventanas para que entre aire en la organización, hay que ventilar.  Tienes puertas y ventanas abiertas para contribuir con tu punto de vista. Por mi parte, usaré la etiqueta ZEMOS98 para que puedas seguir las conversaciones abiertas a través de los blogs, con el consiguiente feed.

Artículos relacionados

7 comentarios

amalio a. rey 16/09/2009 - 18:57

Me ha encantao el post. Muy interesante, Julen. Aprendizaje abierto por un tubo. Reflexión transparente. Coincido con lo d crecer pero no desarrollarse, fenomenalmente resumido.

Responder
Ricardo_AMASTE 16/09/2009 - 21:03

Y es que el mundo es un pañuelo!!
Ya me iré dejando caer de vez en cuando por vuestra deriva.

Responder
Jesús Fernández 18/09/2009 - 10:05

Pues… Una empresa de 4 es casi inevitablemente artesana… 😉 Todos se ocupan de hacer lo que hace falta, en lugar de hacer su trabajo.

Sobre todo al principio, ¿no importa más…

• crear más que resolver,
• transformar más que conseguir,
• asombrar más que ganar?

Cuando pasa el tiempo, lo ideal se materializa y la pasión disminuye.
Cuando las metas se multiplican, cada uno tiene cosas que hacer.
Y cuando alguien se incorpora a lo ya empezado, no ha podido crear desde la pasión.

Crear y producir… es tan diferente.

Responder
Ricardo_AMASTE 18/09/2009 - 12:04

Jesús, suena un poco desolador pensar así en el futuro.
Hay que buscar la manera de re-definirse, re-inventarse. Reflexión en acción y crear-produciendo.

Responder
Jesús Fernández 18/09/2009 - 20:52

Sí, Ricardo, tienes razón. Al releerlo, mi comentario parece el borde de un desierto interminable… Pero no era mi intención.

Yo he vivido, dentro de mi empresa (grande), cómo un grupo de gente pequeño, un embrión de algo que debía crecer… se mantenía en esa situación transitoria durante bastante tiempo. Configuraron una especie de comunidad de práctica sin que nadie les dijera nunca qué era eso y sus rendimientos fueron sorprendentes durante casi dos años. Pero… luego llegó el momento de crecer. Aunque tarde, llegó. Y entonces ya nada fue igual.

Sólo quería decir que tenemos que descubrir cómo crecer de otra forma (aunque igual, Julen, acabamos aceptando que efectivamente no se puede). Ya hay gente que ha aprendido a emprender y gente que está dispuesta a hacerlo. Pero nadie ha descubierto aún cómo crecer conservando o dispersando pasiones al mismo ritmo.

Lo que quería decir es que necesitamos encontrar alguna de las claves para avanzar un poco en ello, que investigar ahí puede dar frutos interesantes.

Responder
Julen 22/09/2009 - 06:02

@Amalio, va a ser una prueba interesante, seguro, de la que espero aprender.
@Ricardo, quizá podamos construir una conversación abierta en forma de macroconsultoría compartida… lo que tenga que ser será.
@Jesús, yo creo que si vamos cambiando el horizonte el proyecto se recrea todo el tiempo. Eso sí, si hay «un objetivo», «una misión», «un proyecto»… pues más complicado para los que aterrizan con él empezado y ya definido, ¿no? La lógica de ver la empresa desde la persona te lleva a considerar una evolución no previsible sobre la base -también- de proyectos personales. Pero, claro, qué tonterías digo: las personas no vienen a realizar sus proyectos a las empresas, eso lo hacen en otros ámbitos de su vida.

Responder
Consultoría artesana en red » (Des)organízate y emprende culturalmente hablando 25/11/2011 - 05:37

[…] ir ordenando poco a poco algunas ideas junto a la gente de ZEMOS98 y compartirlas por aquí, en un ejercicio abierto que nos hemos propuesto. Me interesa mucho comprender las dinámicas del proyecto cultural con relación a los nuevos […]

Responder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.