Aviso que este post es autoego, con ciertas dosis narcisistas. O sea, que hablamos de este blog. Pero… esto sí que es un servicio y lo demás tonterías. Ya sabéis que no me tengo por un geek ultra y que más me interesa quiénes (a fin de cuentas creo que os debo algo) que cuánt@s personas os dais una vuelta por aquí. Quizá por eso llevo media hora torturando sin parar los experimentos de Fernando Plaza en su compareblogs. A veces no te das cuenta de la utilidad de una herramienta hasta que empiezas a salsear con ella… y con tus propios datos. Y vaya manera de salsear la que puedes obtener sacando información vía compare blogs. Me quito el sombrero, Fernando.
Mirando y mirando las toneladas de información que puedes sacar de compare blogs, me quedo con lo siguiente.
- No entiendo muy bien por qué pero veo que en total sois 127 suscriptores, con lo que me acabo de poner un poco nervioso, porque esto empieza a ser serio. Que no, que es broma 😉
- Ya sabéis que tengo un blogobrother. Compartimos suscriptores, como no podía ser de otra manera, pero como somos diferentes, es lógico que también converse con nosotros gente diferente. Un detalle: somos el 630 y el 631 de la lista de Fernando Plaza. Ja ja ja, como hermanitos, vamos de la mano, uno detrás del otro. Casualidades de la vida… y últimamente llevo dos (la otra tiene que ver con otro bloguero insigne enamorado de la isla de El Hierro).
- Parece que hay una comunidad de allegad@s a este blog que compartís quereres con Diario de un director de sistemas, El blog de Gonzalo G. Cotorruelo, La maldición de Sísifo, David Monreal y el ya citado Creative Minds.
- Un día de Navidad del año pasado decidí escribir con más frecuencia. Me sentía a gusto y esto hizo que un encefalograma un poco plano se disparara.
- Entre las etiquetas por la que más me clasificáis veo: empresa, management, consultoría. Lógico. Plas plas plas plas. Un poco de pena, sniff, sniff… que no aparezca «personas», pero es ésta una etiqueta demasiado grande para concretar el contenido, ¿verdad?
- ¿Qué otros blogs leéis? Pues, cómo no, San Enrique Dans (el cuarto misterio de la iglesia: lo que escribe este hombre y la caña que mete, in presionante), Microsiervos, Estratega (cerrado por unas ¿largas? vacaciones), ALT1040, El Blog Salmón…
- En la lengua de Shakespeare sólo encuentro entre los 30 blogs a los que más estáis suscritos a Boing Boing (al que yo, por cierto, no lo estoy). Os animaría a seguir Smart Mobs, el blog de Nicholas Carr o a Michael Bauwens y su gente de P2P Foundation. Y si queréis estar al tanto de la web 2.0 podéis seguir a Dion Hinchcliffe o a Ross Mayfield. Bueno, de todas formas, yo trataré de contar aquí lo que esta gente escribe.
En fin, que me paro porque me emociono. Si el Cluetrain Manifiesto comenzaba diciendo que los mercados son conversaciones, ahora, en este mercado de la bloguería, sé un poco más con quien converso. Así que no se me ocurre otra cosa más que darle las gracias a Fernando Plaza. Ya dirás qué se te debe, compañero. 😉
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3 comentarios
Quizás añadiría una cosa más que no has dicho (demasiado modesto para ser de Bilbao…). Y es que todos esos datos (los suscriptores, el crecimiento, etc, etc.) es puramente MERITOCRÁTICO. En esto de los blogs, con 0 barreras de entrada y 0 capacidad de tener «clientes cautivos», cada uno obtiene el reconocimiento que merece. Y si la gente te sigue (te seguimos) es porque lo que escribes es sumamente interesante.
Y una vez peloteado, se despide atentamente su anónimo consultor.
Ya dirá qué se le debe, joven 😉
Mi orgullo acaba de flaquear un poco dándome. El blog de Jaizki -con 32- y RichDadClub.es -con 27- están todavía lejos de los 50 subscriptores. Habrá que hacer más méritos.
En cuanto a la percepción de los blogs como sistema 100% meritocrático, sí y no.
Es cierto que en los blogs tú te lo curras, no hay barreras de entrada ni clientes cautivos. Sin embargo, no es necesariamente el que más méritos hace el que más subscriptores tiene.
Al final, influyen diversos factores como la cantidad potencial de gente lectora de blogs interesada en los temas que tratas, tu habilidad para darte a conocer y algunos más.
Hay gente escribiendo cosas muy interesantes pero que no dedica tiempo a comentar en otros blogs con lo que nadie sabe ni que escriben ni qué escriben.