Nuevo plan en bici RSSuave: hacia el Mediterráneo a saldar cuentas pendientes

by Julen

Entre los ya bastantes viajes pendientes en bici que voy acumulando, uno que en su día planifiqué tenía que ver con pedalear por tierras cercanas al Mediterráneo: el Parc Natural dels Ports y la ruta del Císter estaban ahí llamando a la puerta. La pandemia nos cortó la ruta programada por las Aldeias Históricas de Portugal –espero que en la Semana Santa del año que viene podamos volver a la carga– y casi casi se nos echa encima de los planes estivales. Parece que la sangre no va a llegar al río y que, si no hay contratiempo de fuerza mayor, podremos mover los dos platos de la Oiz. Sí, dos platos que algún día, creo que no muy lejano, se verán reducidos a uno solo. Pero eso es harina de otro costal.

En los webinars que el incansable Chus, de Rutas Pangea, nos organiza los jueves por la tarde (podéis consultar la información su blog) uno de los proyectos que se ha puesto en valor es el de los Caminos Naturales. Pues bien, mi idea es hacer parte del GR99, el Camino Natural del Ebro, aunque con cierta libertad. Le leía a Ander Izagirre que a él le gusta comenzar sus viajes desde casa. A mí, en parte, también. Y, como él, también cultivo ciertos rituales previos a la salida. Ander decía que se rapaba el pelo y eso me suena. No llego al cero, pero cerca le ando. Esta vez saldré ligero de equipaje –o sea, mochila a la espalda– para en una primera etapa subir hasta Miranda de Ebro y coger allí el GR99. Bueno, miento porque creo que lo cogeré un poco antes, en Puentelarrá.

Seguiremos, por tanto, el curso del Ebro a través del GR99, pero solo hasta Alfaro, porque, previo paso por Cintruénigo para saludar a un amiguete, tengo la intención de pedalear la Calcenada. ¿Qué es esto? Pues una marcha que organizan ya desde hacia varios años en Calcena y que consisten en una circular al Moncayo. Poca broma: algo más de 100 kilómetros y más de 2.000 metros de desnivel acumulado. Esta ruta estaba en mi lista de pendientes desde hace tiempo. Espero que por fin podamos colorcar la correspondiente muesca en la mochila.

Luego tengo la intención de volver al GR99 camino de Zaragoza y continuar hasta Ascó. Este es otro punto marcado en el mapa. Sí, su central nuclear. Ya os enteraréis en su día del motivo. De momento, el Ebro espero que me conduzca hasta allí. Claro que volveré a decirle de nuevo adiós de forma temporal para dirigirme al Parc Natural dels Ports. Tiene tela esta zona, un macizo que deja a un lado las Terres de l’Ebre y se adentra en las provincias de Teruel y Castellón. O sea, Cataluña, Aragón y la Comunidad Valenciana andan de por medio. Ya me gustaría saber cómo se gestiona este tinglado. Por lo que he leído hay mucho bosque de pino silvestre, valles con encinares e incluso bastante hayedo. La orografía se eleva hasta los 1.441 metros en el monte Caro y hay que decir que buena parte del parque está por encima de los 1.000 metros. De hecho en la etapa que me adentra en su territorio se sube prácticamente de nivel mar; o sea, un buen repecho. En cualquier caso, tengo todavía que diseñar los tracks por el Parque Natural.

Desde allí bajaré de nuevo a la costa para acercarme a un lugar que siempre ma ha parecido que tiene una magia especial: el Delta del Ebro y su parque natural. Hace años pasamos por allí un par de veranos y tengo muy buen recuerdo. Llevamos las bicis y dimos muchos paseos entre los arrozales. Tengo marcado un restaurante en concreto para volver a degustar un arroz que nos dejó marcados. Me hace especial ilusión, la verdad. Así pues, buscaré de nuevo las marcas del GR99 y terminaré lo que había comenzado en Puentelarrá hasta llegar a la desembocadura en el Mediterráneo. Por cierto, espero también quedar con viejas amistades en Tortosa. A ver si es posible.

La ruta continurará desde el Delta del Ebro de nuevo hacia el interior en dirección al monasterio de Poblet y pedalear la ruta del Císter. Esta es otra de esas rutas que tenía marcada en el mapa. Habrá que organizarse para compaginar pedaleo y patrimonio cultural e histórico. Será una buena forma de terminar el viaje. Si todo va bien finalizaré en Barcelona el 9 de agosto. Habrán sido 19 días de pedaleo. Allí quiero coger un autobús nocturno y volverme para Bilbao. Este es plan. Tengo que pensar qué nombre le ponemos a la ruta porque incluye, como os he explicado, tramos del Camino Natural del Ebro, pedaleo por el Parc Natural del Ports y la ruta del Císter. Ya se nos ocurrirá algo. Admitimos sugerencias.

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4 comentarios

Juan Manuel Muñoz 22/06/2020 - 08:39

La denominación más evidente tendrá que incluir NATURAL. Y quizás también Río. Son mis sugerencias.
Espero que esté plan veraniego te salga redondo y que disfrutes, dejando atrás los «pendientes»

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Julen 22/06/2020 - 08:41

Hola, Juan. A ver qué tal se nos da. Suave, suave. Algo se nos ocurrirá para ponerle nombre a la ruta 🙂
En Semana Santa del año que viene… volvemos a intentar lo de las aldeias históricas, si tienes disponibilidad.

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Juan Manuel Muñoz 22/06/2020 - 13:06

Como siempre estaré atento a tus crónicas viajeras.
Semana Santa 2021 por las Aldeias me gustaría, pero como dices habrá que ver que disponibilidad tendré para esa época. En la situación actual estar fuera de casa es impensable. Abrazos

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Balance de 12 días de ruta en bici #BilbaoBilbaoMTB – Consultoría artesana en red 03/08/2020 - 08:59

[…] ruta sencilla con salida y llegada en Bilbao, fuera esta en la fecha prevista o en otra anticipada. Mi plan original de ir hasta el Mediterráneo usando como eje inicial el Ebro pero luego incorporando otras referencias llegaba hasta el 10 de agosto. La ruta ha concluido, sin […]

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