Al mal tiempo buena cara. Mientras el coronavirus la está liando parda, no queda otra que entretenerse con las cosas del cicloturismo de cualquier forma… menos pedaleando ahí fuera. Seamos buena gente y aguantemos el chaparrón. Chus Blázquez, de Rutas Pangea, ha escrito un artículo que te recomiendo de veras si te ha pillado la pandemia en plena faena cicloturista. Mientras, los demás dejamos volar la imaginación y repensamos planes.
Bueno, pues en estas estaba, dando por aplazada nuestra ruta por el GR22 en Portugal, cuando el amigo Juan Muñoz Luque publicaba en el grupo de Facebook Ciclismo sin prisa un artículo explicando cómo había previsto su bikepacking particular para esa ruta. Allí nos mencionaba a Alberto y a servidora. Su post me ha animado a escribir este en el que explico mi método «minimalista». Eso sí, os recomiendo dos lecturas previas porque no es la primera vez que toco este tema. En el blog que me sirvió para mi tesis doctoral ya escribí Cicloturismo minimalista y en este mismo blog publiqué La logística de un viaje en bici. Este nuevo post «afina» si cabe un poco más la idea minimalista.
En principio, el concepto que manejo es el de pedalear de la forma más parecieda a como lo haría cualquier otro día que salga al monte con mi bici de montaña habitual por aquí donde vivo. Es decir, la idea es que, aun estando de cicloturismo, la experiencia de pedaleo no sea muy diferente de la de todos los días. En mi caso, casi siempre salgo con una mochila a la espalda. Es un camelback en el que suelo llevar lo típico: chubasquero, multiherramienta, cámara de repuesto, bomba, alguna barrita y cosas así. La mochila y yo somos uno. Son tantos años con ella a la espalda que cuando salgo con la bici de carretera es como si me faltara algo 😉
Comencé en el cicloturismo con un transportín atrás, pero enseguida me di cuenta de que, si no tenía que llevar material de acampada –esta es la variable fundamental– una mochila era más que suficiente. La Transpirenaica de 2011 fue la última ruta en la que anclé mi Old Man Mountain a la rueda trasera. Por cierto, mi cicloturismo lo pedaleo con bici de montaña de doble suspensión. Cuando hablo de que solo llevo mochila, se trata de una Vaude Splash de 25 litros, aunque la he llevado siempre en su formato plegado, que me da 20 litros.La mochila tiene varios compartimentos: uno principal y otros tres en la parte exterior, además de dos laterales y uno muy pequeño en la cinta que hace de cinturón. Por cierto, es la mochila que podéis ver en la foto que acompaña esta imagen y que el año pasado hizo Juan en el viaje por el Alentejo.
¿Qué llevo? Voy con los detalles de lo que había previsto para los 15 días por el GR22. Hay que tener en cuenta que era «entretiempo» (abril) y pedaleando muchos kilómetros por la Serra da Estrela, a veces por encima de los 1.000 metros de altitud.
- Compartimento principal
- Camiseta manga corta + calzoncillo + calcetines (va en una bolsa individual cerrada)
- Pantalón de monte largo (con cremallera para hacerlo corto si hace falta)
- Plumífero (plegado no ocupa ni pesa casi nada, un invento)
- Zapatillas ultraligeras (las hay baratas y bien plegadas no ocupan mucho)
- Traje de baño y camiseta para dormir (va en bolsa individual cerrada)
- Polar ligero
- Chanclas
- Gorra (puede ir puesta o no; si llueve puede ser útil bajo el casco)
- Bridas
- Enchufe con doble USB, un cable USB-TipoC y otro cable USB-mini (va en bolsa individual de cierre hermético)
- Kindle (lector ebooks)
- Batería 6000 mAH + auriculares inalámbricos (es una pieza solo)
- Maquinilla de afeitar, espuma en envase mini o monodosis de las típicas de hotel y aftershave (va en un neceser pequeño)
- Gorro de piscina
- Manguitos y perneras
- Compartimento exterior 1
- Botiquín mini (llevo lo básico: monodosis de betadine, tiritas, bálsamo de tigre y algunos ibuprofenos y fortasec)
- Neceser (pasta de dientes mini, cepillo mini, microcepillo, cortauñas, multiusos mini, colonia)
- Aguja e hilo
- Recambio de pasta de dientes (1 o 2 más según días de ruta)
- Proskin en una cajita mini
- Gel de baño en tamaño típico de dosis de hotel
- Cepillo mini (para limpiar ropa u otro tipo de manchas)
- Cartera con documentación básica, llaves y libreta mini con boli y lápiz (todo esto en un compartimento especíico)
- Compartimento exterior 2
- Candado minimalista
- Algún mapa en papel (no siempre pero alguna vez he llevado)
- Compartimento exterior 3
- Toallitas y pañuelos de papel
- Compartimento en la cinta que hace de cinturón de cierre de la mochila
- Protector solar y protector labial
- Bolsillos laterales de la mochila
- Chubasquero mini, cortavientos mini
Además, en el bolsín trasero, bajo el sillín llevo lo siguiente:
- 2 cámaras Tubolito (sí, son bien caras pero ahorras peso y espacio), 5 parches y desmontables
- 2 bombonas CO2, una de ellas con adaptador
- Minibomba
- Multiherramienta y destornilladorpequeño aparte
- Cinta aislante (mejor opción es la cinta americana, que alguna vez también he llevado)
- Cera para la cadena (en un bote de tamaño reducido, diferente según los días de ruta)
- Un trapo y guantes de latex
Decir, por último que llevo toda la cartografía y los tracks en el GPS de la bici (en mi caso un Garmin 1030) y también suelo llevar en el smartphone la misma información por si fallara por alguna razón el GPS. En el móvil llevo una de las pantallas preparada con todas las apps que me pueden ser útiles incluyendo una de reparación (Bike Repair).
4 comentarios
Jaja, yo soy el tercero, pero soy un poco menos ordenado que mis compañeros. Me muevo, en varios aspectos, tras la estela de Julen por lo que diré que llevo sólo una mochila con un número de compartimentos que desconozco. Llevo cosas, las menos que puedo y lo más livianas posibles. Suelo utilizar, para que no se me olvide algo importante, una hoja excel que me pasó el referente en la que aperece el kit básico de ropa, repuestos y otros aparatitos. Y normalmente vuelvo a casa sin utilizar alguna de las pocas cosas que meto en la mochila. Pero bueno, un placer.
Sí, pero ya te captamos para el lado oscuro: solo con mochila. Tiempos aquellos de las alforjas… 😉
Gracias por el artículo Julen, llevo tiempo revisando, probando y comparando apps relacionadas con el mundo de la bici y las rutas y me encantaría ver esa pantalla de tu móvil. Un abrazo.
Ahora mismo ya no existe la «pantalla» porque la creo cuando comienza el viaje, pero la siguiente vez la comparto. De todas formas, en esa pantalla (en mi caso 30 iconos) suelo incluir estas apps de este tipo:
– Mapas e info sobre la ruta: gpx viewer, google maps, wikiloc, previsión del tiempo, wikipedia, google lens, acceso directo a una carpeta de dropbox en la que tengo información de la ruta
– Fotografía: album, Flickr, Instagram, photo&picture resizer, bokeh (utilidad de la cámara)
– Para facilitar el posteo diario: wordpress con entradas ya preparadas (para postear las crónicas), strava, garmin connect, relive
– Reparaciones: bici repair
– Alojamientos: booking
– Redes sociales: twitter, whatsapp, facebook
Vamos, de este estilo. Lo junto en una pantalla para que me sea más fácil. Lo mismo hay que dedicarle otro post jajajaja.