Replegada en un ovillo, de vuelta a la posición fetal. Por dentro un amasijo de sentimientos en ebullición a duras penas contenidos por las fuerzas de seguridad. Y ya han surgido las primeras disidencias. Las lágrimas escuecen pero buscan allá fuera una salida a lo que se ha convertido en un lugar insoportable.
No hay razón, no hay origen. Es un inmenso polvorín donde hace tiempo que todos han predicho tu triste final. Tu diálogo interior rebota contra las paredes de la lógica y se enmaraña en hilos a cual más doloroso. Lo sentimos, te comprendemos, tienes nuestro apoyo. Te ofrecemos esa bata blanca que sigue ahí enfrente, entre la ventana y tú. La luz se enrosca en torno a la silueta de tu captor. Dale las gracias.
Muchos intentos. Cada uno es una razón para comprender que el túnel tiene la salida tapiada. En realidad no hay túnel. Es una gran superficie diáfana y gris, sin señales, sin puntos de referencia. Pero es la superficie donde vives.
La conexión es débil y extraña. La cama ha aceptado deformarse para acoger tu forma. Dispones de un mundo irreal en el que navegar. Sí, Novartis es tu alimento para habitar en ese mundo hediondo, tan real, tan irreal. Tómate la píldora, es la hora.
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La foto es de gilderic en Flickr.
3 comentarios
Buenos días,
Curiosidad : ¿Qué es Novartis aparte del laboratorio farmaceútico?
@Rafael, el texto sólo quería indicar eso precisamente: que la farmaceútica y sus preparados químicos es lo que alimenta a mucha gente «necesitada» de droga para continuar por aquí.
Ok, yo es que cada vez que oigo hablar de ansiolíticos y antidepresivos (según tengo entendido, el segmento de mercado de mayor prescripción en los países occidentales de las Big Pharma) se me vienen a la cabeza dos cosas :
1/ el soma de los alfas del mundo féliz de Huxley
2/ ¿Hasta cuándo nosotros los niños mimados del sistema vamos a aguantar esto?
Un saludo